Pesto de tomate seco y avellana
Ingredientes para los tomates secos en aceite:
- 400 gramos de tomates secos
- 1 litro de agua
- 200 mililitros de vinagre de manzana, o vinagre balsámico
- Ajo, laurel y guindilla
Ingredientes para el pesto:
- 250 gramos de tomates secos en aceite bien escurridos
- 1 diente de ajo pelado
- 50 gramos de avellanas
- 50 gramos de queso parmesano rallado
- Entre 100 y 150 mililitros de aceite de oliva, utilizad el mismo aceite en el que conservo los tomates secos pues tiene un delicioso sabor.
Preparación para los tomates secos:
En una olla llevar a ebullición el agua y el vinagre. Introducir los tomates y mantener así durante unos minutos dependiendo de lo secos que estuviesen los tomates. Generalmente bastan entre 3 y 5 minutos, deben quedar blanditos pero enteros. Escurrir los tomates y dejar secar sobre un trapo bien extendidos varias horas o incluso un día entero. Deben perder toda la humedad. Una vez secos, introducir en un frasco bien limpio y esterilizado con varios dientes de ajo ligeramente chafados, hojas de laurel u otras hierbas … y guindillas si queréis que piquen muy ligeramente!. Llenar el frasco con aceite de oliva procurando que los tomates queden bien cubiertos para que no enmohezcan. Cuanto más tiempo pase, más buenos estarán, y el aceite se convertirá en algo delicioso que os recomendamos que utilicéis pues tiene un delicioso sabor a tomate seco. Podéis conservarlo durante varios meses sin problemas.
Preparación para el pesto:
En un robot o batidora introducir todos los ingredientes salvo el aceite. Triturar todo el conjunto hasta obtener una pasta espesa. Con el robot en marcha añadir el aceite en hilillo hasta obtener la consistencia que os interese. Como veis en las fotos, nos gusta dejarlo espeso. De ese modo luego lo podemos adaptar a muchos usos. Si lo usáis como salsa para pasta bastará diluir el pesto con un poco de agua de cocción. Se conserva durante al menos una semana bien cerrado en un frasco de cristal en el frigorífico.